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Es posible que, como presidente de España, no se eche mucho de menos a Mariano Rajoy, pero nadie negará que sí que se echan de menos sus intervenciones públicas en donde, en sus declaraciones, se hacía la picha un lío, soltaba frases que tenían coherencia ninguna o comentaba algo fuera de lugar. ¡Teníamos comidilla y memes para días!

Algunas de las frases de rajoy han quedado para la posteridad, como por ejemplo, su gran hit “Es el vecino el que elige al alcalde y es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde”, del que incluso se hicieron canciones, o la de “Cuanto peor mejor para todos y cuanto peor para todos mejor, mejor para mí el suyo, beneficio político”, aunque mi favorita, por razones que me atañen, es la de “Me gustan los catalanes porque hacen cosas”, frase que utilizo muy habitualmente.

Y esto, ¿para qué es?

Podría ser otra de sus frases míticas, en referencia, por ejemplo, a cualquier cuestión relacionada con su presidencia, su partido político o para este país, pero resulta que el “y esto, ¿para qué es?” es la pregunta que le soltó a su fotógrafo oficial, Jose Antonio Ramos, el primer día que lo vio en su oficina, tirado en el suelo para intentar hacerle una fotografía. Lo que no sabemos es la respuesta que le dio el fotógrafo, aunque su pretensión, según cuenta, era la de dar una imagen más cercana de Rajoy de cara a las redes sociales.

Fotografías que se hicieron virales

Ramos solía retratar a Rajoy en sus paseos matutinos en donde se le veía caminando rápidamente, con mucha marcha, en distintos lugares del mundo, como la Ciudad Prohibida de Pekín o en Brasilia. Fue precisamente en la capital de Brasil donde, para dar un poco más de vidilla a la fotografía, que era bastante gris y sosa, saturó los colores y el resultado fue una fotografía con aire apocalíptoco que dio lugar a muchos memes en los que se le comparaba con “The Walking Dead” o con “Mad Max: Fury on the Road”.

Rajoy “curioseaba desde su móvil y se reía mucho”

Muchas personas cercanas a Rajoy han hablado de su gran sentido del humor y de que suele utilizar mucho la retranca gallega, un humor entre irónico y negro muy común de esa zona de la península. Lo que no sabíamos es que ese sentido del humor le hacía, asimismo, poder reírse de sí mismo. Según cuenta Ramos, Rajoy curioseaba desde su móvil y se reía mucho con los memes que le hacían. No me puedo dejar de imaginar a Rajoy mirando los memes desde su teléfono y riéndose… ojalá Ramos hubiese inmortalizado alguno de esos momentos.

Sin duda alguna, echamos de menos esta vertiente del expresidente, así que esperamos que vuelva a nuestras vidas pero convertido en un showman o en un humorista. Con sus frases enrevesadas, desbancaría a los hermanos Marx y, con sus comentarios políticos fuera de lugar, Berlanga y Gila revivirían. Seguro que en el “Luar” de Gaioso serían bienvenidas sus actuaciones.