Se ve que los Samsung Galaxy Note 7 han venido con un defectillo sin importancia de fábrica: EXPLOTAN.
Así pues, si no quieres acabar con la cara como la de Harvey Dent cuando hables por teléfono…
Es mejor que tengas siempre un extintor cerca.
¿Qué hacer si se te rompe el teléfono móvil?
Si te explotó en la cara, no hay nada que hacer. Puedes ir al médico para intentar que revivan a tu teléfono, pero es poco probable que funcione. Mejor pide que te arreglen la cara.
Pero si tu teléfono ha sufrido algún simple desperfecto menor, es probable que baste con llegar a repararlo a algún centro especializado en reparaciones de estos dispositivos. A veces puedes incluso arreglarlo tú mismo, pero si no eres un entendido en el tema, lo mejor es dejarlo en manos de un profesional.
Existen portales online que te asesoran y ofrecen las piezas de reparación apropiadas para el modelo de tu teléfono, como por ejemplo ilevante, que además de trabajar en otros sectores, han estado siempre muy enfocados en la reparación de aparatos electrónicos, tales como pantallas de móviles y otros repuestos.
La desventaja de las pantallas de los móviles de hoy
No solo debido a su desmesurado tamaño cada vez mayor sino también a la fragilidad de su material. Aunque hoy ya estén haciendo pantallas flexibles que parecen de goma, todavía muchos modelos de teléfonos móviles tienen una pantalla rígida y muy frágil.
No es necesario que te explote el móvil en la cara, basta con que este se te caiga al suelo desde un metro de altura para que se rompa la pantalla o al menos se le haga una grieta fea y molesta.
Se te «obliga» a disponer siempre de una funda o carcasa protectora que a veces dificulta el contacto dactilar para interactuar con la pantalla táctil, pero aun así a veces no es suficiente. Si se te rompe la pantalla no hay mucho que hacer, tendrás que comprar una nueva, y no son precisamente baratas.
El negocio de la venta de pantallas de recambio para móvil no es ningún bulo, es una fuente de ingresos para las compañías.