Precisamente los geeks y los frikis no tenemos demasiada dama de ser unos don juanes y de hacer el tralarí con todo lo que se mueve ni nada de eso, más bien rascamos a veces bola cuando conocemos alguna chica en un chat (Ay, el IRC… ¡qué tiempos!), en un foro de anime y luego tenemos la suerte de que podemos conocernos en persona en alguna ComiCon o a alguna Campus Party que quede cerca de nuestras ciudades y ahí ya brota el amor y lo que surja.

Pues aun con todo lo bonito e ideal que esto puede resultarnos, la Web de Poker Online Titanbet.es nos da algunas razones de peso por la que jugar al poker online es todavía mejor que relacionarse íntimamente con una chica friki o geeky, ahí van:Primero de todo, dura más. Y tú, que no tienes demasiada experiencia, puedes tener un percance a los 2 minutos. Y LO SABES.Puedes ser un suertudo sin necesidad de aplicarte el ungüento para el acné, sin llevar el mejor cosplay de Thor incluso sin rebuscar en el armario la camiseta del anime menos mainstream, para marcar tu alto nivel de frikerío.

Cuando terminas una partida, puedes empezar otra. Como cuando te matan en el «Call of Duty» pero sin tener la partida guardada, tú ya sabes. Como en las épocas de la Master System sin tarjeta de memoria.

Puedes jugar contra cualquier oponente y no son la típica chica de 80 kg disfrazada de Sailor Moon, que suele ser el nivel de tus conquistas. (¿Os acordáis de ese episodio de «The Big Bang Theory»?) ¡Pues no se hable más!

Si tienes una mala mano, no pasa nada. Reseteas y todo es volver a empezar otra vez, sin más.

No te dirán nunca ahora no, ni tengo dolor de cabeza… es como cuando propones una partida de World of Warcraft online pero mejor, porque no hay trolls y encima puedes ganar dinero, en vez de gastártelo en espadas…

Puedes comer ganchitos y beber pichicola en gayumbos sin que le importe a nadie … bueno, eso lo harías igualmente si viniese la chica a casa, ¡no tienes remedio!

En fin, en la viñeta encontraréis muchas más razones… si no os hemos convencido es que no tenéis remedio y es mentira eso de que preferís la vida online a la real. He dicho.